Estamos en búsqueda del mejor perfil para nuestro cargo de COORDINADOR(A) TÉCNICO(A).
Conoce aquí los requisitos y envía tu CV a info@aibe.ec hasta el viernes 8 de octubre de 2021.
DESCRIPCIÓN DEL PUESTO
Nombre del puesto: Coordinador(a) Técnico(a)
Misión del puesto: La coordinación técnica es el departamento agregador de valor dentro de la Asociación, en donde se manejan todos los temas de interés y coyuntura en relación a la industria de alimentos y bebidas, brindando soporte a la Presidencia Ejecutiva y Directorio de la AIBE.
Responsabilidades y funciones:
Planificar, coordinar, ejecutar y dar seguimiento a las actividades de la Asociación.
Apoyar activamente los requerimientos de la Presidencia Ejecutiva y de Directorio.
Relacionamiento con otras cámaras, gremios e instituciones públicas y privadas.
Conocer todos los temas coyunturales de afectación a la industria (económicos, tributarios, políticos, ambientales, técnicos, entre otros).
Redacción de informes, documentos técnicos y cartas para autoridades, cámaras, gremios, otras industrias e instituciones públicas y privadas.
Realización de presentaciones para autoridades, cámaras, gremios, directorio, otras industrias e instituciones públicas y privadas.
Activa participación en el desarrollo de temas de interés de la industria (charlas a colegios, relacionamiento con tenderos, desarrollo de webinars, realización de eventos entre otros).
Monitorear y apoyar el cumplimiento de planes establecidos con la Agencia de Comunicación.
Competencias técnicas necesarias
Excelente redacción.
Capacidad de análisis.
Conocimiento básico de temas de índole político, económico, ambiental y técnico en relación a la industria de alimentos y bebidas, entre otros.
Manejo básico de indicadores económicos y obtención de información de fuentes primarias (SRI, INEC, BCE, SUPERCIAS).
Otras competencias deseadas
Capacidad de relacionamiento con todo tipo de stakeholders.
Hasta octubre de 2021, un millón de microempresarios en Ecuador están obligados a declarar el impuesto a la renta del 2% de sus ingresos brutos obtenidos entre enero y junio, como parte del Régimen Impositivo para Microempresas (RIM), creado en la Ley de Simplificación y Progresividad Tributaria, que está vigente desde diciembre de 2019.
En este artículo web, la Asociación de Industrias de Bebidas No Alcohólicas del Ecuador (AIBE) acerca estas preguntas y respuestas claves acerca de qué es y cómo se aplica este impuesto, con el fin de que todos nuestros públicos objetivos estén bien informados, sepan tomar decisiones efectivas y eviten contratiempos relacionados con el pago de esta obligación tributaria.
¿En qué consiste este impuesto?
Este es un impuesto que grava -o cobra- los ingresos obtenidos, por mínimos que sean, sin tomar en cuenta los gastos o costos incurridos por los microempresarios. Tampoco considera si obtuvieron o no ganancias o utilidades en este 2021, segundo año de la pandemia ocasionada por la propagación de la COVID-19.
¿A quién está dirigido?
Este impuesto está dirigido a las personas naturales, sociedades y emprendedores que son considerados como microempresarias dentro del catastro -o listado- del Servicio de Rentas Internas (SRI).
Forman parte de este listado quienes registran ingresos anuales brutos de hasta USD $300.000 y/o tengan hasta 9 trabajadores. Según Diario El Universo, en Ecuador están registrados 1 millón de microempresarios. De los cuales, 340.000 aún no realizan su declaración del pago del 2% de impuesto correspondiente a enero-junio de 2021.
¿Qué es el catastro del RIM?
El catastro del RIM es un listado que el SRI elabora de forma automática. En él, están registrados los contribuyentes que cumplen las condiciones especificadas en la respuesta anterior. Para conocer si se forma parte o no de este listado, esta información se puede encontrar en: https://www.sri.gob.ec/.
Las personas que consideren que no deben formar parte de este catastro, pueden solicitar a esta entidad su exclusión, en un proceso que dura hasta 120 días hábiles.
¿A quién no está dirigido?
Según el SRI, este impuesto no está dirigido a las personas que son parte del Registro Impositivo Simplificado (RISE) o de la economía popular y solidaria. También, no forman parte de este régimen las personas que prestan servicios profesionales, personas que se dediquen a actividades de construcción y transportación, personas que perciban ingresos como empleados bajo relación de dependencia, entre otros.
¿Hasta cuándo debo pagar?
La declaración de este impuesto debe hacerse de manera semestral, es decir, en enero y julio de cada año. Para el primer semestre de este año, si bien este trámite debía cumplirse en julio, el SRI emitió la Resolución 032, con la cual se extendió las fechas de pago para octubre de 2021, de acuerdo al noveno dígito del Registro Único de Contribuyentes (RUC):
Fechas máximas de pago – Impuesto 2% para microempresarios
Noveno dígito del RUC
Fecha máxima de vencimiento
1
21/10/21
2
21/10/21
3
22/10/21
4
25/10/21
5
26/10/21
6
27/10/21
7
27/10/21
8
29/10/21
9
29/10/21
Fechas máximas de pago – Impuesto 2% para microempresarios
Esta extensión de tiempo no implica que los microempresarios deban pagar intereses y/o multas por no haber declarado este impuesto en julio.
¿A qué período de tiempo corresponde el pago?
Los microempresarios registrados en el catastro del RIM deben declarar al fisco el 2% de los ingresos brutos que obtuvieron en el primer semestre del 2021, es decir, de enero a junio.
¿Qué sucede si no pago?
Si no se paga este impuesto dentro de los límites determinados por la ley, los microempresarios deberán pagar multas o intereses.
¿Cuáles son las otras obligaciones que deben cumplir los microempresarios?
Los contribuyentes sujetos al RIM deben cumplir con los siguientes deberes formales, según lo previsto en la normativa tributaria vigente:
Impuesto al Valor Agregado (IVA).
Impuesto a Consumos Especiales (ICE).
Retenciones en la fuente del Impuesto a la Renta.
Anexo Transaccional Simplificado (ATS).
Anexo ICE.
¿Por qué este impuesto está y puede continuar afectando la economía?
Este impuesto afecta a la economía de los microempresarios y del país desde enero de 2021, en que se hizo la primera declaración correspondiente al periodo de julio a diciembre de 2020, en una economía ecuatoriana totalmente debilitada por la pandemia.
De acuerdo con Valentín León, economista de la firma consultora Keyword, se advierten al menos 4 efectos negativos relacionados con la aplicación de este impuesto a la economía ecuatoriana:
Aumento de la informalidad
Falta de liquidez
Reducción de oportunidades
Oportunidades
Aumento de la informalidad
“El impuesto al 2% a microempresarios contradice el objetivo de simplificación y progresividad tributaria de la ley a la que pertenece. Los microempresarios, al ver afectada su economía por el pago de este impuesto, están optando por seguir trabajando desde la informalidad, comprando y vendiendo sus productos al margen de la ley tributaria, fomentando la evasión y elusión de impuestos. Ello es muy negativo para el país (…)»
2. Falta de liquidez
“Este impuesto, al gravar los ingresos brutos obtenidos, sin tomar en cuenta ni gastos, costos ni utilidades, puede afectar a la liquidez de los negocios porque los microempresarios, con la finalidad de cumplir con esta responsabilidad tributaria, pueden sacrificar los pocos recursos que tienen disponibles, los que podrían ser más necesarios para continuar trabajando y de esta manera reactivar su economía (…)»
3. Reducción de oportunidades
“Los microempresarios, al tener que pagar un impuesto a la renta del 2% de sus ingresos brutos al fisco, van a verse obligados a tomar decisiones difíciles, tales como reducir el sueldo de sus trabajadores o hacer recortes de personal. Esto sería muy grave porque, en el contexto económico actual, se deben brindar todas las condiciones necesarias para la reactivación económica y este impuesto refleja lo contrario (…)”
4. Endeudamiento
“Considerando que, como consecuencia de la crisis económica que estamos viviendo, la cual se ha profundizado por la COVID-19, muchos negocios puede que estén generando ingresos pero no así ganancias. Por ello, los microempresarios van a tener que endeudarse para pagar este impuesto y ello no es conveniente para su economía (…) ”
¿Cuál es el contexto político para la puesta en marcha de este impuesto?
Si bien la eliminación de este régimen impositivo fue una oferta de campaña política por parte de Guillermo Lasso, desde el 24 de mayo de su posesión como Presidente de la República a la fecha, no existe un pronunciamiento oficial al respecto. Incluso, la reforma tributaria para este objetivo todavía no se oficializa.
El 15 de enero de 2021, la Cámara de Comercio de Quito presentó una demanda de constitucionalidad por el impuesto a los dividendos y otras observaciones que contempla la ley de Simplificación Tributaria.
El 13 de julio, la Cámara de Comercio de Guayaquil (CCG) emitió una solicitud a la Subsecretaría General Jurídica de la Presidencia, solicitando que se reforme la norma que establece el pago de la tasa de impuesto sobre la renta del 2% sobre los ingresos brutos.
El 20 de julio, con 121 votos a favor, la Asamblea Nacional del Ecuador emitió una resolución en donde se exhorta al Presidente de la República a que envíe, de manera urgente, al poder legislativo, un proyecto de ley que derogue este impuesto.
El 28 de julio, Salomé Velasco, Secretaria del Gabinete Sectorial Económico y Productivo, contestó la solicitud enviada por la CCG indicando que el cambio de la tasa está siendo considerado dentro de la Reforma Tributaria. Y, a la fecha, la CCG está analizando de manera técnica que este pago se convierta en crédito tributario.
Línea de tiempo:
31 de diciembre de 2019: Publicación de Ley de Simplificación y Progresividad Tributaria.
Enero-Febrero-Marzo 2021: Guillermo Lasso, candidato presidencial, ofrece eliminar este impuesto en su campaña electoral.
15 de enero de 2021: La Cámara de Comercio de Quito presentó una demanda de constitucionalidad por el impuesto a los dividendos y otras observaciones que contempla la Ley de Simplificación Tributaria.
24 de mayo: Posesión de Guillermo Lasso como Presidente de la República.
6 de julio de 2021: El SRI emitió la Resolución 032 que amplió el plazo de pago del impuesto para octubre.
13 de julio de 2021: La Cámara de Comercio de Guayaquil solicita la reforma de la norma.
20 de julio de 2021: La Asamblea Nacional exhorta al Gobierno la derogación del impuesto.
28 de julio de 2021: Instrumentación de la Ley de Simplificación y Progresividad Tributaria.
28 de julio de 2021: El Gobierno responde a la solicitud de la Cámara de Comercio de Guayaquil.
Francisco Mena, Director Ejecutivo de la AIBE, resalta que en Ecuador existen aprox. 130.000 tiendas de barrio. Muchas de ellas, al estar consideradas como microempresas dentro del catastro del SRI, se ven afectadas seriamente por este impuesto:
“Desde el sector privado, tenemos muchas interrogantes respecto a la aplicabilidad de este impuesto. Por una parte, no sabemos qué deben hacer los microempresarios que aún no han declarado o no van a alcanzar a declarar este impuesto hasta fines de octubre. Por otra parte, no sabemos tampoco cuál sería la figura tributaria a la que los microempresarios que ya pagaron este impuesto en julio se acogerán en caso de que este régimen impositivo se derogue en los próximos meses (…) Por ello, nos sumamos al llamado que desde las Cámaras de Comercio de Quito y Guayaquil y más actores del sector privado se está haciendo para que, desde la Presidencia de la República, se emita el decreto ejecutivo a través del cual se elimine este tributo (…)”, finaliza.
La Asociación de industrias de
bebidas no alcohólicas del Ecuador-AIBE y cuatro unidades educativas de Quito y
Guayaquil se unieron para fomentar el reciclaje de botellas PET, a través de
una iniciativa denominada “1,2,3 A Reciclar”.
Esta campaña arrancó en Quito
con los colegios Planeta Azul y Municipal Fernández Madrid, en los que se concientizó
a los estudiantes sobre la importancia de separar y reciclar los envases PET.
Para facilitar esta actividad, la AIBE entregó contenedores y guías de reciclaje
a las comunidades educativas y brindó charlas informativas sobre el tema.
En Guayaquil, este compromiso
se realizará con los estudiantes de las unidades educativas El Libertador y
Réplica Aguirre Abad.
Francisco Mena, Presidente
Ejecutivo de la AIBE asegura que la industria actualmente recicla el 70% de las
botellas que coloca en el mercado. Sin embargo, es muy importante que desde
cada espacio se trabaje para esta causa. “Todos somos corresponsables del
cuidado del planeta por ello buscamos con esta iniciativa transmitir el
reciclaje como una forma de vida y llevarlo a través de los jóvenes a todos los
hogares ecuatorianos”.
Desde la industria de bebidas no
alcohólicas se busca implementar la filosofía de economía circular para
optimizar los recursos y su reutilización en los procesos de producción, de
esta manera el crecimiento económico va de la mano de un desarrollo sostenible
para la conservación del planeta.
La AIBE llega a más de 2.600
estudiantes. A través de un video, los jóvenes conocen el impacto que tienen
los desechos en las ciudades donde viven. En Quito, a diario se generan 2.200
toneladas de residuos y 4.200 toneladas diarias en Guayaquil. Por ello, la
importancia de separar y reciclar los envases PET, no solo para reducir la
cantidad de toneladas que se acumulan en los botaderos, sino para ayudar a los
recicladores de base en su trabajo y para que más envases PET sirvan para
elaborar nuevos.
Este plan cuenta con el apoyo
del Ministro Gobernador de Galápagos, Norman Wray, quién en el marco del Día
Mundial de limpieza de playas felicitó esta iniciativa y enfatizó en la
importancia de la aplicación del reciclaje en el continente para contribuir al
cuidado de las islas Galápagos, declarado Patrimonio Natural de la Humanidad.
La industria de bebidas no
alcohólicas y los estudiantes participantes sellaron el compromiso asumido con una
pulsera simbólica que les recuerde el impacto que esta pequeña acción causa en
la sociedad. Lograr una nueva cultura de reciclaje es el objetivo final.
El
aprovechamiento e industrialización de residuos, análisis del ciclo de vida de
los productos, la producción limpia mediante el ahorro de recursos y una
infraestructura sostenible y resiliente son algunos de los compromisos
adquiridos por el sector industrial con la firma del Pacto por la Economía
Circular, realizado en Guayaquil, entre el Gobierno Nacional y el sector
productivo, organizaciones sociales y la academia.
Este pacto cuenta con 161 adherentes. La AIBE
es parte de este.
El ministro
de la Producción, Comercio Exterior y Pesca, Iván Ontaneda, en el evento
resaltó la importancia de realizar un cambio decisivo en el modelo de
desarrollo, “el reto es transitar de una economía lineal a una circular,
consumiendo menos materias primas, optimizando los procesos productivos,
alargando la vida útil de productos y materiales, generando energía, así como
aprovechando de mejor manera los residuos”.
La AIBE es
una industria comprometida que busca trabajar a través de la concienciación a
la comunidad, sobre la importancia de alcanzar una responsabilidad compartida y
cuidado del medio ambiente para las futuras generaciones.
La Asociación de Industrias de Bebidas no Alcohólicas del Ecuador (AIBE) y el Servicio Ecuatoriano de Normalización (INEN) firmaron un convenio para la cooperación interinstitucional en ámbitos técnicos, regulatorios y metodológicos.
El
convenio de contribución entre las entidades se llevó a cabo en las oficinas de
INEN en la ciudad de Quito entre el Econ. Francisco Mena, presidente ejecutivo
de AIBE y el Ing. César Díaz, director ejecutivo del INEN.
Este acuerdo
se efectuó con el fin de promover el desarrollo, la educación, la generación de
empleo, el cuidado del medio ambiente y fomentar la innovación y calidad de los
productos de bebidas no alcohólicas del país.
Cesar
Díaz Guevara, director ejecutivo del INEN, manifestó que la institución
compartirá sus competencias con la AIBE para así cumplir sus objetivos
legítimos como la protección de la salud humana, animal y vegetal y el cuidado
del medio ambiente.
Por su
parte, Francisco Mena, presidente ejecutivo de AIBE afirmó “Como industrias
estamos orientados a pensar en el bienestar del consumidor final y con este
acuerdo interinstitucional podemos brindar un valor agregado a nuestros
productos”.
A
través de este convenio se ejecutarán talleres de capacitación y formación
profesional, así como procesos de asesoría.
La
firma de acuerdo que se efectuó entre la AIBE y el INEN incluye cooperación
científica, tecnológica e industrial, basados en normas recíprocas y principios
de igualdad, complementariedad, solidaridad, transparencia y equidad.
USD 1.384 millones de ventas en la cadena productiva y 56.316 empleos generados son los aportes más destacados de la industria de bebidas no alcohólicas en el Ecuador.
Quito, abril de 2019.- La industria de bebidas no alcohólicas del Ecuador (AIBE) presentó los resultados del Estudio sobre la importancia económica y social del sector de bebidas no alcohólicas y su cadena de valor.
Francisco Mena, Presidente
Ejecutivo de la AIBE, destacó el impacto positivo que deja en el país la
industria a la que representa. “Somos empresas que dejan huella en Ecuador a
través de la innovación, de la cadena productiva y de iniciativas sostenidas de
responsabilidad social. Nuestro
impacto se traduce en miles de empleos que permite calidad de vida y
oportunidades de desarrollo a miles de familias. Por cada empleo directo creado
por nuestra cadena se generan dos empleos indirectos y por cada dólar que genera
la industria de bebidas no alcohólicas se crean 0,70 centavos en el resto de
los sectores de la economía”, afirmó.
Los
resultados del Estudio realizado corresponden al periodo 2017-2018 y los
presentó el economista Alberto Acosta Burneo, donde se conocieron los
siguientes datos:
Aporte a la economía
La cadena
de valor de la industria de bebidas no alcohólicas está conformada por insumos,
manufactura y comercio.
El aporte de
la cadena de producción a la economía fue de USD 1.384 millones en ventas.
Además, registró un crecimiento anual de 5,4% en ventas de la industria
manufacturera.
El P.I.B.
alcanzó los USD 650,2 millones. Mientras que los impuestos tributados fueron de
USD 167,6 millones.
Generación de empleo
Durante el
2017, la industria de bebidas no alcohólicas generó 17.207 empleosdirectos
Por cada empleo directo se
crearon dos empleos indirectos. Por ejemplo, en servicios de comunicación,
financieros, logísticos, transporte de materia prima, alimentación de los
empleados, combustibles, servicios profesionales, inmobiliarios, telecomunicaciones,
seguros, servicios básicos, mensajería, vidrio, cartón, químicos, etc. En total
se obtuvieron insumos de 21 subindustrias.
El empleo total generado
por la cadena de elaboración de bebidas no alcohólicas (industria, proveedores,
comercio) fue de 56.316 plazas a
nivel nacional, lo que representa el 7,3% de empleo en la industria manufacturera.
Es decir, 212.874
personas dependen directa e indirectamente de esta cadena productiva. Esto, si se considera que
una familia
promedio en Ecuador tiene
3,78 miembros (INEC, 2010).
Impulso al emprendimiento
El 71% de las ventas de bebidas no alcohólicas son en tiendas de barrio, bodegas y
distribuidoras.
Las ventas promedio de
bebidas gaseosas, jugos y tés representan cerca de un 20% de las ventas en las
tiendas de barrio.
Las bebidas no alcohólicas
son productos ancla en las ventas de las tiendas porque impulsan las ventas de
otros productos como alimentos.
Por
su parte, Luz María Valdiviezo, Presidenta del Directorio de la AIBE, reafirmó
el compromiso de la industria de bebidas no alcohólicas con el país. “Nuestro
compromiso se refleja en los constantes procesos de innovación que nos permiten
crear tecnología para generar envases amigables con el ambiente, por ejemplo.
Ahora nuestros envases contienen el 25% de resina reciclada grado alimenticio y
en Galápagos ya sustituimos el plástico desechable por retornable y vidrio. Somos
corresponsables con los consumidores. Hemos promovido, dentro de nuestras
políticas internas, la autorregulación y la responsabilidad social y
empresarial como puntales de nuestra industria”, acotó.
Objetivo: Evaluar la asociación entre la ingesta de edulcorantes sin azúcar (NSS) y los resultados de salud importantes en adultos y niños generalmente saludables o con sobrepeso u obesos.
El objetivo del acuerdo entre ambas entidades es fortalecer el control, fomentar el cumplimiento de la normativa vigente y su eficiente aplicación por parte de las empresas embotelladoras de bebidas no alcohólicas a nivel nacional.
El convenio tendrá una duración de 4 años, en los cuales las instituciones generarán un plan de acción, capacitaciones y el intercambio de buenas prácticas.
Guayaquil, septiembre de 2018.- La Asociación de Industrias de Bebidas No Alcohólicas del Ecuador (AIBE), y la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) suscribieron un convenio de cooperación interinstitucional para fortalecer el control, fomentar el cumplimiento de la normativa vigente y su eficiente aplicación por parte de las empresas embotelladoras de bebidas no alcohólicas a nivel nacional.
El documento, que fue firmado por Juan Carlos Galarza, director ejecutivo de Arcsa, y Francisco Mena Guarderas, presidente de AIBE, involucra obligaciones conjuntas entre ambas instituciones para garantizar una producción de bebidas no alcohólicas que se apegue a la normativa sanitaria, y cuidar la salud de los consumidores.
Entre sus compromisos, Arcsa mantendrá vigilancia en las embotelladoras nacionales y colaborar en conjunto con AIBE para la creación de programas de capacitación sobre Buenas Prácticas de Manufactura y almacenamiento dirigido a las empresas embotelladoras de bebidas no alcohólicas acorde a la normativa vigente.
El convenio, que tiene una duración de cuatro años a partir de su firma, involucra la generación de un plan de acción entre ambas entidades para el cumplimiento de sus compromisos, los cuales se verificarán mediante informes semestrales.
Mediante este acuerdo interinstitucional, AIBE fortalece su compromiso por el desarrollo de la industria ecuatoriana de bebidas no alcohólicas.
El presidente de la Asociación de Industrias de Bebidas No Alcohólicas del Ecuador (AIBE), Francisco Mena, afirma que la utilización de ENC es respaldada por un “sólido conjunto de pruebas científicas y extensas publicaciones”.
Y asegura que varias organizaciones internacionales –como la Organización para la Agricultura y la Alimentación de la Organización Mundial de la Salud, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos y la Autoridad Europea de Seguro da Alimentaria– han catalogado de inocuos a los ENC. Además añade que el uso de estos endulzantes es autorizado por las autoridades sanitarias de Ecuador.
En cambio, el Ministerio de Salud Pública (MSP) está consciente del debate que genera la utilización de estos endulzantes, según lo afirmó durante una entrevista concedida a este Diario hace varios días el subsecretario nacional de Promoción de la Salud e Igualdad, Carlos Cisneros.
Incluso, esa cartera de Estado trabaja en una reforma que ampliaría, en tamaño, al sistema actual de alerta que tienen los alimentos procesados con ENC.
Sobre estos cambios, Mena sostiene que hasta el momento no conocen el proyecto de reforma, pero que están “abiertos para conversar con las autoridades acerca de nuevas propuestas relacionadas con el sector”.
Además, añade que el gremio que representa ha pedido al Gobierno que se lo incluya en los diálogos y discusiones para la construcción de la reforma.
“Esta medida de grandes implicaciones para el sector agroalimentario ecuatoriano debe ser analizada y discutida en un proceso amplio y participativo”, dice Mena.
Los niños y adolescentes cuyas madres siguen cinco hábitos saludables (llevar una dieta sana, hacer ejercicio con regularidad, mantener un peso recomendado, beber alcohol con moderación y no fumar) son 75% menos propensos a la obesidad en comparación con los niños de mujeres que no tienen un estilo de vida saludable. Es lo que revela un estudio dirigido por la Escuela de Salud Pública TH Chan de la Universidad de Harvard que examinó los casos de 24.289 jóvenes de entre 9 y 18 años.
“Concluimos que las madres deben considerar su estilo de vida no solo para beneficiarse a sí mismas, sino que también a sus hijos”, dice a “El Mercurio” Qi Sun, autor de la investigación.
Demostrar esta relación entre madres saludables y niños más sanos sirve para frenar la obesidad infantil desde la casa, asegura.